domingo, 23 de octubre de 2011

Los acompañantes dados de la mano,
Se mantienen en vilo ante las sombras que acechan fuera del círculo.
Los juegos quedan a las espaldas de un niño que habla solo,
Y las ganas de hacerte caer en la locura,
Rebosan en una palangana con mierda, gente y barro.
Un beso, una caricia, una gota de agua,
Una puerta que se cierra de golpe, un acto violento, un chillido.
El portal esta abierto y los monstruos salen en busca de la luna,
Que ilumina la claridad en medio de la espesura negra.
Un ángel, una sombra, un demonio al cruzar la esquina
Un infierno bajo la última llama
De una vela encendida.
Un te quiero, un te echo de menos,
Un todo, un nada, un destino,
Y un pitillo tirado al suelo
Donde queda atrás, fuera de sueños y caminos.

1 comentario:

  1. Aceptación, esperanza, rendición... me siento identificada con esto. Muy bueno.

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